Soda nace boca abajo, con un soplo. Pesa 20 kilos y es soplado, extraído y trabajado por tres maestros vidrieros. El resultado es un único volumen de vidrio en el que tres grandes pétalos hacen de pie.
En Soda la materia vibra: la envoltura dura y martillada fragmenta la transparencia y le da una estética primitiva. Es el valor artístico trasladado al producto industrial.
Descubra cómo Soda está elaborado, entra en el horno.
PD. Oye, no olvides que Soda es una mesa de centro, no un taburete.¡No te sientes en él!